Solo hay que dar un paso más. Cada día.
Rendirse es la opción más sencilla y viable. Se acabará todo el sufrimiento en el preciso momento que decidas rendirte.
Y encontrarás mil formas de justificar tu decisión de abandonar y no sentirte culpable por ello.
Ahora solo deberás encontrar el siguiente reto para que posteriormente y si así lo decides, puedas abandonar o posponer de nuevo.
Déjalo para el próximo lunes. O mejor, para el año que viene.
O puedes dar un paso más y llegar hasta donde sea que quieras estar. Sin pedir permiso a nadie. Sin justificaciones.
Solo un paso más, eso es todo.